Unos 16.000 canarios desconocen que son celíacos según la Asociación Celíaca de la Provincia de Santa Cruz de Tenerife (ACET), que ha precisado que uno de cada 150 niños de la región padece esta enfermedad. Aunque no existe un censo oficial, se estima que en Canarias padece esta enfermedad entre el 0.7 y el 1 % de la población, aunque sólo hay diagnosticados 2.000 enfermos entre las dos provincias, y es dos veces más frecuente en la población femenina.
La ACET acaba de ofrecer estos datos a la vez que presentaba su próximo programa de actividades en el que destaca la impartición formación continua y la puesta en marcha de una campaña para captar nuevos socios colaboradores, entre los que pretenden incluir restaurantes, hoteles o cualquier otro establecimiento que sepa o quiera saber qué alimentos se pueden ofrecer y de qué forma para evitar contaminaciones cruzadas.
Otro objetivo importante es ofrecer a sus asociados recetarios y elaboraciones seguras de dietas sin gluten a través de talleres y seminarios. En este sentido, la organización que acoge a los celíacos canarios ha puesto en marcha un programa de análisis de productos alimentarios canarios de gran raigambre popular. De esta manera, se está procediendo a analizar estos alimentos para comprobar la cantidad de gluten presente en ellos ya que la cultura culinaria de las islas es rica en productos y platos que por naturaleza deberían estar exentos de gluten. El reto es elaborarlos industrialmente con seguridad y garantías y comprobarlo mediante análisis efectuados en laboratorios acreditados, que actualmente sólo existen en la Península.
Otra cuestión que abordarán en este ejercicio es el sobrecoste que suponen los productos específicos, que se calcula en 1.700 euros al año por celíaco. En este sentido, la ACET ha contactado con diversos departamentos del Gobierno de Canarias para obtener ayudas directas o indirectas para los enfermos celíacos, teniendo en cuenta la asociación familiar con la que aparece esta enfermedad, por lo que no es infrecuente que haya más de un miembro familiar afectado.
De momento, lo que se ha logrado es una ayuda indirecta al haberse suprimido un impuesto de entrada que antes existía a los productos específicos para celíacos que entraban por los puertos canarios.
Las actividades de ACET se realizan por personal voluntario, ya que sólo se sostiene a través de las cuotas de los enfermos, puesto que actualmente la asociación carece de ningún tipo de ayuda pública.
No hay comentarios:
Publicar un comentario